lunes, 20 de diciembre de 2010

LA AGENDA SIGUE OCULTA

Los socialistas andaluces siempre hemos sostenido que Javier Arenas posee una “agenda oculta” para Andalucía, y éste, como para desmentir tal cosa, hace apenas unos días desvelaba con gran aparato mediático su supuesto contenido. Lo cierto es que las medidas divulgadas en prensa por el señor Arenas no pasan del mero oportunismo, contienen propósitos bienintencionados que coinciden con realidades ya puestas en marcha por el Gobierno andaluz e incurren en un uso más bien vacío de contenido de la palabra “austeridad”.

Su agenda oculta sigue siendo eso: una agenda oculta. Para imaginarnos una hipotética Andalucía gobernada desde fundamentos conservadores nada mejor que fijarnos en qué es lo que hace el PP allí donde gobierna. Un ejemplo: en Madrid y Valencia apenas se está aplicando la Ley de Dependencia; no es “su ley”, no creen en ella y sin duda la deben considerar un despilfarro. Para la derecha, todo gasto social es en sí mismo un despilfarro. Si hablamos de altos cargos, Arenas tendría que nombrar cuarenta más en Andalucía para tener los mismos que Galicia por número de habitantes, treinta y uno más para alcanzar los que tiene la Comunidad de Valencia por provincia y nada menos que ochocientos cuarenta y tres para ponerse a la altura de los que tiene Madrid. Si el señor Arenas equiparase su sueldo al de Esperanza Aguirre, cobraría, como ella, un quince por ciento más que el presidente del Gobierno de España y un treinta por ciento más que José Antonio Griñán como presidente de la Junta de Andalucía. Gastaría más en coches de alta gama, más en dietas y mucho más en alquileres, pues ésas son las cuentas de las comunidades autónomas gobernadas por el PP. Como se ve, una traducción muy peculiar del concepto de austeridad.

Lo cierto es que la Andalucía que todavía ambiciona gobernar algún día el señor Arenas es una tierra radicalmente distinta a la de hace tres décadas. Partiendo de una región olvidada, donde venían perpetuándose las más dramáticas desigualdades sociales, donde pintoresquismo y pobreza parecían consustanciales a lo andaluz, el PSOE hizo posible desde el Gobierno autonómico una comunidad desarrollada, igualitaria, justa, a un tiempo moderna y fiel a sus tradiciones, referente en iniciativas científicas, todo ello teniendo que salvar una desventaja secular con respecto a otras tierras de España y, sobre todo, haciendo posible que tantos y tantos andaluces emprendedores a los que nunca se tuvo en cuenta pudieran sacar adelante sus proyectos y crear riqueza. Almería es el mejor ejemplo de todo esto, por lo extremado del cambio que se ha producido en la provincia: de olvidada entre las olvidadas a motor económico, de apesadumbrada tierra de emigración a lugar de acogida, y todo ello gracias al esfuerzo de trabajadores y empresarios, pero también al apoyo incondicional del Gobierno andaluz, un Gobierno de izquierdas, progresista, que siempre ha tenido un proyecto claro y abierto para Almería y para Andalucía en su conjunto.

Austeridad no es sólo una palabra: es la determinación con que el Gobierno andaluz ha hecho posible ahorrar cuatrocientos millones de euros en los últimos cuatro presupuestos. Sólo los hechos cuentan. Lo que el señor Arenas dice que haría en Andalucía no concuerda con lo que su partido está ya haciendo en otros sitios, y desde luego no nos hace olvidar que la derecha nunca ha creído en el futuro de nuestra tierra, de ahí que sea tan evidente la existencia de esa agenda oculta cuyo contenido, sin duda, no sonaría tan bien como ese mal articulado conjunto de lugares comunes que le ha hecho llegar a los ciudadanos andaluces.

lunes, 13 de diciembre de 2010

Derechos humanos: objetivo de los progresistas.

Sesenta años después de que las Naciones Unidas invitaran a los Estados miembros a celebrar el 10 de diciembre el Día de los Derechos Humanos la defensa de estos sigue siendo imprescindible en todo el mundo.
El trabajo en pro de los derechos humanos es una de las señas de identidad política del PSOE. Así, para el actual Gobierno de España los derechos humanos son parte inherente de nuestra política nacional y también de nuestras relaciones internacionales.

El PP dice que está a favor de los derechos humanos, pero la realidad es que a menudo se ha mostrado dividido en temas tan elementales como la abolición de la pena de muerte y defiende la ruptura con los países que no le son ideológicamente afines, condicionando políticamente la cooperación para el desarrollo y castigando de paso a sus poblaciones en lugar de promocionar los Derechos Humanos.

Los Gobiernos socialistas impulsan relaciones internacionales basadas en el diálogo, el multilateralismo y la cooperación, frente a la exclusión, la confrontación y la ruptura. El respeto de los Derechos Humanos y de las libertades fundamentales, así como el respeto de los principios de libertad, democracia y de un Estado de Derecho, son valores que deben extenderse a todo el mundo.

La política debe estar orientada a mejorar, mediante instrumentos de naturaleza diplomáticos, comerciales, de cooperación financiera y de ayuda al desarrollo, el respeto y la defensa de los Derechos Humanos. Esta es una de las señas de identidad de la política de los Gobiernos progresistas. Bajo esta premisa el Gobierno de España ha impulsado, entre otras, la Ley que permite el matrimonio a personas del mismo sexo o la Ley de Igualdad, mientras que el  PP se ha opuesto a ambas y las ha recurrido ante el Tribunal Constitucional.

Desde el Partido Socialista seguiremos trabajando en la promoción y protección de los Derechos Humanos, que consideramos universales e indivisibles, en todas las políticas.

En España el Gobierno socialista seguirá reconociendo y tratando de restituir moralmente a las víctimas del franquismo y a sus familias. Seguirá defendiendo la igualdad de todos y todas con políticas de apoyo a los colectivos más vulnerables socialmente. Y seguirá luchando contra la violencia de género y contra la trata de seres humanos.

Y el Gobierno de España seguirá orientando su política exterior hacia los Derechos Humanos, comprometido en la lucha contra la pobreza, contribuyendo a extender los derechos civiles, sociales, económicos y culturales a todos los ciudadanos y ciudadanas, trabajando por fortalecer la justicia internacional.

Avanzamos en la constitución de una sociedad civil más igualitaria, eliminando los obstáculos que frenan la participación de las mujeres en el mercado laboral, cambiando la mentalidad y los prejuicios sexistas en los centros de trabajo.

El Partido Popular dice estar a favor de los derechos sociales, del derecho a la igualdad, de las libertades fundamentales y de la no discriminación, sin embargo el PP ha boicoteado sistemáticamente todas las medidas presentadas que suponían un avance en ellos.

lunes, 6 de diciembre de 2010

CONFIANZA FRENTE A IRRESPONSABILIDAD

Al celebrar el aniversario de la Constitución española celebramos también el consenso que hizo posible la transición a un Estado de Derecho plenamente democrático desde el largo túnel de la dictadura franquista. En aquella encrucijada histórica de la segunda mitad de los setenta, todas las fuerzas políticas asumieron que sólo desde la responsabilidad y la altura de miras, sólo dejando a un lado las naturales divergencias ideológicas y los intereses partidistas, sería posible construir un futuro sólido. Así fue, y España ha vivido desde entonces el periodo de mayor estabilidad, modernización y bienestar de toda nuestra historia.

Hoy estamos en una nueva encrucijada no menos histórica y en medio de una nueva transición, la que va de un modelo económico neoliberal, basado en la especulación y la desigualdad, que se ha venido abajo estrepitosamente, y un nuevo modelo productivo más justo que habremos de propiciar mediante ineludibles reformas. La diferencia es que en esta encrucijada no estamos solos: todo el mundo, y especialmente la Europa de la que formamos parte y en la que ocupamos un lugar importante, está en ese mismo punto del camino, y será entre todos como salgamos de esta difícil situación, cada cual cumpliendo con los compromisos que adquiera y sabiendo que quienes provocaron la debacle económica internacional no renunciarán fácilmente al dominio de los mercados financieros.

España está cumpliendo con sus obligaciones, poniendo en marcha los ajustes y reformas a las que nos hemos comprometido, actuando con firmeza y determinación, y sin olvidar que en cualquier caso las medidas de hoy deben también garantizar las políticas sociales de mañana. Las medidas adoptadas ya han logrado reducir el déficit público un 47% en un año, lo que significa que estamos en la buena dirección. Pero en ese esfuerzo, que no es sólo del Gobierno, sino de toda la sociedad española, el principal partido de la oposición no ha querido entrar en ningún momento. El ejercicio de responsabilidad que hizo posible el pacto constitucional ha desaparecido por completo de la hoja de ruta que sigue la derecha en España: el PP vio desde el principio que la crisis económica, lejos de ser un problema, era una extraordinaria oportunidad electoral.

Durante estos dos últimos años, el Partido Popular no ha movido un solo músculo para empujar en contra de la crisis. No han apoyado ni una sola de las medidas puestas en marcha, ni siquiera aquellas con las que estaban de acuerdo, ni siquiera las que eran fruto de compromisos adoptados en el seno de la Unión Europea y que vinculaban a todos los socios. Ése ha sido su papel hasta hace apenas unos días. Ahora, al parecer, los dirigentes de la derecha han decido que es el momento de pasar a la acción, pero no a una acción que favorezca los intereses de España, sino que, generando desconfianza, los debilite.

Puesto que a nuestro país le hubiera resultado mucho más fácil luchar contra la crisis si el principal partido de la oposición hubiera ayudado a ello, ¿por qué no la han hecho? Si el PP sabe que la solvencia de España está fuera de toda duda, ¿por qué se empeña en trasladar una falsa imagen de inestabilidad política, económica e institucional? Si la confianza en nuestro país es un elemento fundamental para recuperar el ritmo de crecimiento y favorecer la creación de empleo, ¿por qué construir un discurso que atemoriza a los ciudadanos y alienta a los especuladores? ¿Acaso la derecha española estaría dispuesta a ganar unas lecciones incluso a costa de heredar un terreno calcinado, si eso fuera necesario? No cabe ya mayor insensatez.

Para las PYMES, para reducir el déficit, para generar empleo

Dinamizar la actividad económica para poder crear empleo es el objetivo por el que el Gobierno de España sigue trabajando con todo su empeño.

Esta semana el Gobierno socialista ha dado un paso más en el desarrollo de su Plan para reactivar la economía y recuperar el empleo con la aprobación de un nuevo paquete de medidas fiscales, económicas y laborales.

La Estrategia de Economía Sostenible aprobada por el Gobierno socialista hace un año contempla este tipo de actuaciones con las que plantar cara a la crisis y a la pérdida de empleos que ha generado.

Estas nuevas medidas económicas del Gobierno de España se han anunciado tras la reunión del presidente del Gobierno con los responsables de las grandes empresas españolas, a los que ha pedido que se sumen al esfuerzo colectivo para lograr la reactivación económica y para la recuperación del empleo, ya que de estas empresas dependen el trabajo de otras pequeñas y medianas.

El amplio programa de reformas del Gobierno para impulsar un nuevo modelo productivo en España, que refuerce nuestra economía y nuestro mercado laboral, busca también, a través de medidas de ajuste, reducir el déficit público, algo imprescindible para fortalecer la economía española y la confianza de los mercados.

Entre las nuevas medidas que el Ejecutivo va a llevar adelante se encuentran, para favorecer a las PYMES, la posibilidad de amortización del impuesto de sociedades hasta 2015, cuando hasta sólo estaba prevista para empresas de reducida dimensión y para las que mantuviese, su nivel de empleo, y sólo hasta el año 2012. Esta medida permite que las empresas reduzcan su factura fiscal de forma que puedan aumentar su inversión.

De cara a beneficiar a las PYMES también se ha aprobado acabar con la obligación del pago del recurso cameral, un canon que estaban obligados a pagar todas las empresas y autónomos a las Cámaras de Comercio. A partir de ahora será voluntario y la financiación de las Cámaras estará vinculada a los servicios demandados por las PYMES. Esto puede suponer un ahorro empresarial anual de 250 millones de euros de los 90 millones corresponderían a las PYMES.

Con los objetivos de facilitar la conversión en PYMEs de los trabajadores autónomos y de fomentar el autoempleo, el Gobierno va a adelantar lo previsto en la Ley de Economía Sostenible para reducir plazos, costes y obstáculos para crear una empresa, permitiendo la creación de una en 24 horas.

Además otra de las nuevas medidas aprobadas es ampliar el número de empresas que se pueden acoger al tipo reducido del Impuesto de Sociedades (25%), ya que a partir de ahora las empresas que tengan una cifra de negocio de hasta 10 millones de euros se computarán como una empresa de reducida dimensión, hasta ahora sólo podían hacerlo las que tenían un volumen de 8 millones de euros. A esto hay sumarle que el primer tramo de base imponible que tributa este tipo de empresa pasa a ser de 300.000 euros cuando hasta ahora era de 120.000 euros. En España esta medida beneficiará a 40.000 empresas.

Y para reducir el déficit público el Gobierno ha decidido transformar en sociedad estatal el ente público de Loterías y Apuestas del Estado, permitiendo así que incorpore hasta un 30% de capital privado en el marco de la nueva Ley de Juego. Esto se estima que reportará al Estado entre 4.000 y 5.000 millones de euros. 

Igualmente encaminada a reducir el déficit se ha aprobado la creación de la sociedad estatal AENA-Aeropuertos que abierta a la entrada de capital privado en hasta un 49% y los aeropuertos de Madrid y Barcelona se abrirán a la gestión privada. Esta medida se estima que permitirá obtener entre 8.000 y 9.000 millones.

Este nuevo conjunto de medidas económicas contribuirán a reactivar la creación de empleo, inyectar ingresos en las arcas públicas para generar confianza e incentivar la inversión empresarial.

lunes, 29 de noviembre de 2010

PRESERVAR LA VIDA FRENTE AL SIDA

Hace poco más de una semana, la posibilidad de que el Papa Benedicto XVI admitiera el uso del preservativo, en casos excepcionales, para evitar el contagio del sida fue ampliamente celebrado en todos los rincones del mundo como una puerta que parecía abrirse, aunque se tratara de una puerta muy estrecha y en el contexto de un libro de conversaciones. Luego llegaron las matizaciones y lo que parece ser un problema en la traducción del alemán al italiano: donde el Papa hablaba de la prostitución como ese caso excepcional, al parecer estaba refiriéndose estrictamente a la prostitución masculina, de tal manera que no se trataba de una excepción incompatible con la doctrina católica. Es decir, que esa estrecha puerta es mucho más estrecha de lo que parecía en un principio y el aparente gran paso del Vaticano un paso muy pequeño para la Humanidad.

No creo ser irrespetuoso –desde luego no es mi intención serlo- si digo que la insistencia por parte de la jerarquía de la Iglesia Católica en rechazar este método para combatir las enfermedades de transmisión sexual pone en evidencia una desconexión con la realidad que agrava el problema del sida, niega años de investigación científica y tiene como único objeto la imposición a los hombres y mujeres de un determinado y muy riguroso modelo de comportamiento sexual. Así se lo se lo hicieron saber al Papa las autoridades sanitarias mundiales cuando el año pasado afirmó en un viaje a África que los preservativos aumentaban el problema del sida.

Sin duda, África no era el lugar más oportuno para persistir en este monumental error: miles de católicos trabajan allí denodadamente para combatir una epidemia que está diezmando a la población: en el continente africano, contraer la enfermedad es prácticamente una condena de muerte.

Hacer una defensa a ultranza de la vida humana debería conllevar inevitablemente la defensa del uso preservativo o, en caso contrario, supondría una contradicción. Que los sectores más conservadores de la sociedad -también, cómo no, de la sociedad española- sigan empeñados en ir en contra de esta realidad evidente, es un síntoma de inmovilismo, de petrificación moral. Ahí está el alcalde de Valladolid, que más allá del burdo machismo con que comentó el nombramiento de Leire Pajín como nueva ministra de Sanidad, volvió a dejar traslucir cuál es la opinión de la derecha con respecto a los preservativos al decir de ella, con sarcasmo, que “era una chica que iba a repartir condones a diestro y siniestro”. Para siniestra de verdad la postura de quien, al parecer, encuentra tan descabellada la labor de facilitar a los jóvenes el acceso a métodos que eviten el contagio del sida o los embarazos no deseados.

De modo que cuando este miércoles vuelvan a asomar los lazos rojos que simbolizan la lucha mundial contra el sida y se nos recuerde que se trata de una enfermedad que ha matado en tres décadas a más de veinticinco millones de personas, una pandemia que afortunadamente parece haber estancado su avance -aunque están aumentado los casos en Europa oriental y Asia central- pero frente a la cual siguen sin recibir la medicación adecuada la mitad de los nuevos infectados; cuando se nos recuerde el dato revelador de que en España el ochenta por ciento de los contagios se producen por vía sexual, habrá ocasión también para felicitarnos o no ante la posibilidad de que la Iglesia Católica haya empezado a admitir los beneficios sanitarios del preservativo en mucho menos tiempo del que tardó en aceptar que la Tierra giraba alrededor del Sol.

Contra la violencia de género

Esta semana se han celebrado multitud de actos en memoria de las víctimas de la violencia de género y para recordar la importancia de que todos nos impliquemos en esta lucha contra los maltratadores.

El miedo de las víctimas de la violencia machista es lo que les frena a actuar para tratar de cambiar sus situaciones vitales y es, también, el que en muchas ocasiones lleva a estas mujeres a dar marcha atrás después de haber dado el paso de interponer una denuncia contra su agresor.

Este sentimiento de terror es totalmente comprensible en alguien que es constantemente amenaza, vejada, insultada, golpeada y aislada de relaciones sociales. Cualquiera se da cuenta de lo duro que ha de resultar salir de ese círculo vital.

Todos y todas tenemos que estar vigilantes y cuando detectemos un posible caso de violencia de género tratar de llegar a esa persona e informarla de que la esperanza existe, de que hay soluciones, de que las administraciones están trabajando en distintos niveles para ayudarlas a ellas y a sus familias.

El Día Internacional Contra la Violencia de Género que celebramos el 25 de noviembre ha servido también como fecha reivindicativa para hacer una llamada a las administraciones con el fin de que pongan al servicio de las víctimas más recursos.

Para ellas todos los recursos que se destinen son pocos. Pero hay que ser realistas y darnos cuenta de que lo que realmente permitirá reducir las escalofriantes cifras de muertes víctimas del machismo es la concienciación ciudadana.

Las víctimas tienen que sentirse respaldadas no sólo por la Ley, sino por la sociedad. Es más, todos tenemos la obligación moral de ayudar a las víctimas incluso cuando ellas no sean capaces por sí mismas de actuar contra sus maltratadores. Así lograremos que las cifras de muertes por violencia de género en nuestro país se reduzcan además de trabajando por la igualdad real entre hombres y mujeres.

El Gobierno Socialista ha sido y es el impulsor de las políticas de igualdad y la corresponsabilidad entre hombres y mujeres. Ha hecho que la conciliación entre la vida profesional y familiar sea también cosa de hombres, con un permiso de paternidad del que se han beneficiado más de 800.000 hombres desde 2007. Ha ampliado el derecho a la prestación por maternidad a las trabajadoras autónomas, a las situaciones de acogimiento, y lo ha ampliado en caso de parto prematuro u hospitalización del recién nacido. Ha logrado recortar la brecha salarial en cuatro puntos, con un programa de más de 10.000 inspecciones en empresas durante los años 2008 y 2009.

En cambio el Partido Popular, que no ha movido nunca un dedo por la igualdad, pretende dar lecciones de ella cuando se han opuesto sistemáticamente a cualquier avance en este terreno. El principal partido de la oposición defiende ahora leyes a las que votaron en contra y también obstaculiza su desarrollo. Las mujeres no tienen nada que agradecer al PP en materia de igualdad. Si realmente el PP apuesta por la igualdad, que comience por enseñarle al Alcalde de Valladolid y a los dirigentes que le apoyan, el debido respeto a las mujeres.

El PSOE seguirá en su apuesta radical a favor de la igualdad, atendiendo a las necesidades de las mujeres.

Y con la lealtad y corresponsabilidad de las Administraciones y de las fuerzas políticas contra el maltrato asesino, con el Poder Judicial aplicando la  Ley Orgánica de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género y con el esfuerzo y compromiso de todos y todas conseguiremos erradicar la violencia de género.


lunes, 22 de noviembre de 2010

NI UNA AGRESIÓN SIN DENUNCIA

Como cada año, en torno a la conmemoración del Día Internacional contra la Violencia de Género surgen actos públicos, llamamientos a la movilización, campañas, manifiestos, declaraciones, testimonios, artículos. Todo ello, que es empuje y toma de conciencia colectiva, tiene un denominador común: subrayar que cada día que una mujer es asesinada por el hombre con el que está, ha estado o se ha negado a estar ligada afectivamente es el Día Internacional contra la Violencia de Género; que cada vez que la mano de un hombre o su desprecio se precipitan sobre una mujer, ese hombre está vulnerando en un instante la dignidad de todas las mujeres.

Pero un año más el número de víctimas mortales es horriblemente elevado –sesenta y tres mujeres y cuatro niños cuando escribo estas líneas- , y este hecho, que por su propia condición de inconcebible pudiera mover al desaliento, es temerariamente utilizado por quienes cuestionan la necesidad de leyes en materia de igualdad o en materia de violencia machista. Entre los que así lo hacen, los hay que tampoco dudan en promover la falsa idea de que muchas de las denuncias de maltrato son inventadas o buscan otra clase de intereses, cuando los datos demuestran que esto no es en absoluto verdad. De ahí a añorar en privado aquellos tiempos en que se hablaba de “crímenes pasionales” hay apenas un paso muy pequeño.

Lo cierto es que a ese hombre dominador de puertas para adentro, posesivo, envenenado por la violencia, capaz de mantener una imagen social impecable pero al que esperan temblando en casa, a ese hombre deleznable cada vez más mujeres le dicen: basta. Pero han de ser muchas más, y denunciar, y alejarse del verdugo sabiendo que serán protegidas, y si cualquiera de nosotros tenemos conocimiento de una situación de maltrato debemos elegir entre ser cómplices por omisión o aliados de la víctima. Debemos sacarle al agresor, como señala una campaña institucional, tarjeta roja, expulsarle del terreno donde la convivencia democrática se juega con limpieza, con respeto, en condiciones de igualdad.

Lamentablemente, la supresión total de las actitudes que derivan en violencia contra la mujer no es una tarea fácil, porque vienen de muy lejos y están arraigadas en una cultura muy masculina, donde la fuerza física aún tiene en muchos rincones la última palabra, donde el amor equivale a veces a un título de propiedad, donde hombres supuestamente cultos, bien posicionados y con proyección pública siguen expresando su opinión sobre alguna mujer en particular o sobre las mujeres en general mediante comentarios espantosamente burdos, vejatorios e incluso, en alguna ocasión, de una nauseabunda zafiedad, como en el caso reciente un contertulio de Telemadrid: y aún pretenden acogerse a la libertad de expresión o a la natural ligereza de una conversación privada.

Las nuevas generaciones no pueden advertir ni un mínimo titubeo en el compromiso social contra la discriminación sexual y contra la violencia de género, sólo así podremos romper un día el círculo de horror en el que viven atrapadas muchas mujeres, en el que vivimos todos atrapados a través de su dolor y de su miedo y de su injusta falta de autoestima.

Orgullosos de ser Flamencos

El Flamenco ha sido reconocido oficialmente como un patrimonio vivo que, transmitido de generación en generación, confiere a las comunidades y grupos que lo practican un sentimiento de identidad y continuidad que se estima esencial para el respeto de la diversidad cultural y de la creatividad humana. ¡Ya era hora¡.

Me uno a la celebración de la declaración del Flamenco como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. Este es un gran paso no sólo para los aficionados y aficionadas al flamenco, lo es para todos los andaluces y andaluzas, que vemos reconocida la transcendencia y la proyección de nuestras raíces culturales.

Y quiero felicitar a todos los almerienses, porque una parte muy importante de nuestra cultura ha sido identificada y su importancia y proyección mundial han sido valoradas justamente.

Que un organismo como la UNESCO consagre el Flamenco como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad va a servir para que muchos ciudadanos y ciudadanas pierdan sus prejuicios con respecto a este arte y, en muchos casos, con respecto a la cultura andaluza.

Frente a los ataques injustificados contra el pueblo andaluz por parte de determinados políticos que ponen de manifiesto su desprecio y su odio hacia Andalucía y su desconocimiento de nuestra tierra, a nivel internacional se nos reconoce que el Flamenco no es un tópico andaluz sino un patrimonio que merece ser preservado.

Si hoy el Flamenco es posiblemente una de las manifestaciones culturales y artísticas más conocidas en todo el mundo está claro que no es porque ningún organismo internacional lo haya promovido, es porque tiene entidad propia y capacidad para tocar el sentimiento y remover la sensibilidad de cualquier persona, con independencia de su procedencia.

La difusión del Flamenco se la debemos sobre todo a muchos artistas andaluces que han arriesgado y salido fuera de España con su arte.

El Flamenco no deja indiferente, te puede gustar o no, pero no te deja frío. No es necesario ser un experto flamencólogo para darse cuenta de el Flamenco es a la vez que una forma de arte una fuente de inspiración de creadores de disciplinas que no están vinculadas directamente con él. Con esta declaración como Patrimonio de la Humanidad muchos más artistas, y muchos más ciudadanos y ciudadanas, en general, se interesarán por el Flamenco, lo que sin duda permitirá que crezca.

Andalucía, y con ella nuestra provincia, será a partir de ahora mucho más conocida y apreciada gracias a ser cuna de grandes artistas que mantienen vivo, amplían y enriquecen cada día el arte Flamenco.

El Flamenco es parte indisoluble de la Historia de Andalucía, una seña de nuestra identidad, por tanto la declaración de la UNESCO es un triunfo colectivo de toda la sociedad andaluza.

Además el Flamenco es marca, nos representa y nos da a conocer también fuera de nuestra Comunidad y es la principal industria cultural de nuestra Comunidad. Andalucía, exporta cultura, el Flamenco es el elemento más internacional de nuestra cultura.

El PSOE al frente de la Junta de Andalucía seguirá esforzándose en difusión del Flamenco. La multiculturalidad, la tolerancia, la transmisión generacional, el reconocimiento a la tradición y el respeto a las minorías son algunos de los valores recogidos en el Flamenco y son valores progresistas.

Enhorabuena a todos y a todas.

lunes, 15 de noviembre de 2010

Comprometidos con los parados jóvenes y mayores de 45 años

Las personas que tienen mayores dificultades para insertarse en el mercado laboral son los protagonistas de las nuevas iniciativas para crear empleo que ha puesto en marcha el Gobierno andaluz.

Estas actuaciones para el empleo pretenden dar asistencia personalizada a 215.000 parados en Andalucía.

Los desempleados jóvenes y los mayores de 45 años serán los principales beneficiarios de estas nuevas líneas de inserción laboral puestas en marcha por la Junta de Andalucía, poniendo de nuevo en el centro de su gestión pública la creación de empleo.

El Plan Motiva y el Plan 45 Plus son estas actuaciones específicas destinadas a lograr que los colectivos de ciudadanos y ciudadanas que más padecen el desempleo puedan encontrar un trabajo. Ambos planes, aprobados recientemente en el Consejo de Gobierno de la Junta, tienen consignada una inversión conjunta de 485 millones de euros, cantidad que da buena muestra del compromiso del Gobierno socialista andaluz con las personas que padecen el drama del desempleo.

El Partido Popular en Andalucía no deja de repetir los lamentables datos de paro que aún padecemos en nuestra Comunidad pero se queda mudo cuando llega la hora de hacer propuestas para reducir el desempleo.  Y al PP nacional, con Mariano Rajoy al frente, la única propuesta económica que le oímos es la de emular el modelo de recortes sociales y de reducción del número de empleados públicos que Cameron ha puesto en marcha en el Reino Unido.
Pues bien, frente a esto, el Gobierno de José Antonio Griñán ha aprobado un Plan Motiva con una dotación de 381 millones de euros de la que se beneficiarán 150.000 jóvenes desempleados de entre 18 y 29 años.

Este Plan de empleo joven se desarrollará en cinco ejes: uno de ellos fomentará la adquisición de competencias laborales mediante itinerarios de inserción personalizados; se dará formación remunerando con una beca de 20 euros al día la asistencia a cursos por jóvenes de entre 18 y 22 años con cargas familiares, o lo que es lo mismo con una paga mensual de 440 euros aproximadamente; los jóvenes tendrán reservadas el 50% de las contrataciones realizadas en torno a proyectos de interés general y social; se les facilitarán la realización de prácticas profesionales fuera de España; y se incrementarán hasta un 10% los incentivos a las contratación en empresas innovadoras.

Y para los desempleados de más de 45 años con más de un año en paro la Junta pondrá en marcha el Plan 45 Plus, dotado con 104 millones de euros para atender a 65.000 andaluces. A estos parados se les reorientará laboralmente a través del Servicio Andaluz de Empleo (SAE) y se les dará formación específica para que puedan cubrir las demandas del mercado laboral. Para ello se creación unidades de atención en cada provincia, con las que asistir a estos ciudadanos y ciudadanas de más de 45 años. Además se incentivará el autoempleo con 5.500 euros a quienes pongan en marcha un negocio propio que genera al menos un puesto de trabajo.

La reforma del SAE para ser más eficiente en la formación y orientación de los trabajadores se inicia también con estos nuevos planes andaluces de empleo.

La meta de los Gobiernos socialistas es construir un nuevo modelo económico que logre generar más empleo y que este sea de mayor estabilidad y calidad.

SALMERÓN Y ANDALUCÍA

El avance que ha experimentado la sociedad andaluza en las tres últimas décadas probablemente no habría sido el mismo de no haber existido la España de las autonomías. Desde su constitución, en las postrimerías de la década de los 70, la Junta de Andalucía se convirtió en uno de los principales motores de desarrollo del pueblo andaluz. El papel que ha jugado el Gobierno de Andalucía en la mejora de las condiciones de vida de los andaluces y en el impulso de los valores democráticos es incuestionable, y a la vuelta de tres décadas llega el reconocimiento.

El presidente José Antonio Griñán acudió hace unos días a Alhama de Almería como representante máximo de la Junta de Andalucía para recoger el II Premio Nicolás Salmerón y Alonso, que ha recaído en el órgano de Gobierno de los andaluces. El objetivo de este premio, que lleva el nombre del alhameño más ilustre de todos los tiempos, es el reconocimiento de personas o entidades que se hayan distinguido por la defensa, promoción y realización de la ética civil, los valores democráticos, la cultura de la paz y los derechos humanos, o bien que hayan impulsado el desarrollo de los pueblos, la investigación o la puesta en práctica de programas de actuación dirigidos a promover estos valores.

La idea del Ayuntamiento de Alhama de crear el Premio Nicolás Salmerón y Alonso fue doblemente afortunada. Por un lado, el Consistorio alhameño manifestaba su decidida apuesta por la defensa de los derechos humanos y los valores democráticos. Por otro lado, prolongaba en el tiempo el homenaje a su hijo más ilustre, dando de alguna manera continuidad a los actos conmemorativos del centenario de su muerte, celebrados en 2008.

Con Nicolás Salmerón y Alonso, presidente de la I República entre el 18 de julio y el 7 de septiembre de 1873, el ejercicio de la política y la cultura alcanza las más altas cotas de dignidad. Con su negativa a firmar una sentencia de muerte, Salmerón y Alonso escribió una de las páginas más honorables de la Historia de España, y es por ello, por este aldabonazo de integridad y de anticipación democrática, por lo que se le recuerda con tanto orgullo en su tierra. Su actuación se asienta en la modernidad, en la fidelidad a unos principios y en la defensa de los derechos humanos. Por eso es un referente perdurable.

Don Nicolás Salmerón fue un adelantado a su tiempo. Entre otras cosas, asumió hasta las últimas consecuencias, en pleno siglo XIX, una verdad que en el XXI aún niegan alrededor de noventa países de todo el mundo: que quitar una vida humana no tiene nada que ver con cualquier concepto de justicia. Y más allá de aquella decisión memorable, este ilustre almeriense pretendió una regeneración política y social de España que suponía, sobre todo, una mirada moderna sobre la realidad del país; defendió apasionadamente la libertad de expresión; y, en definitiva, dejó una huella vigente en la historia del pensamiento, de las ciencias y de la cultura.

Por eso recordar su figura es una obligación moral y por eso el premio que lleva su nombre sólo habrá de recaer en quienes contribuyan a hacer Historia y a quienes la sociedad pueda recordar con orgullo cuando pase el tiempo.

lunes, 8 de noviembre de 2010

HACIA UNA CURACIÓN DE LA DIABETES

En 1921, el investigador canadiense Frederick Banting demostró que la aplicación de insulina en personas diabéticas mejoraba claramente los síntomas y consecuencias de la enfermedad. A partir de tan excepcional descubrimiento médico, la diabetes dejó de ser una afección mortal y pasó a ser controlable, y como tributo a Banting se celebra cada año, desde 1991, el Día Mundial de la Diabetes coincidiendo con la fecha de su nacimiento, 14 de noviembre.

El próximo domingo, pues, millones de personas en más de ciento sesenta países serán concienciadas nuevamente sobre una enfermedad que algunos incluyen entre las denominadas “invisibles”, por cuanto no duele, ni sus síntomas se manifiestan externamente, ni es tampoco necesario establecer medidas o protocolos que pudieran prevenir un contagio, pues la diabetes no es contagiosa. Así las cosas, los principales mensajes de las asociaciones que agrupan a los enfermos diabéticos se centran en la concienciación de su alcance –es una enfermedad en constante expansión-, las causas, los síntomas, las complicaciones, los tratamientos y la necesidad de mantener los controles pertinentes y llevar un estilo de vida saludable.

En 2006, la Asamblea General de la ONU reconoció la diabetes como una enfermedad crónica debilitante, costosa y con graves complicaciones, que supone una grave amenaza para la salud mundial. Se calcula que en España puede haber dos millones y medio de diabéticos, entre los que están diagnosticados y los que desconocen que padecen la enfermedad. Este desconocimiento es uno de los grandes problemas al que se enfrentan las sociedades, pues una detección temprana facilita el inmediato tratamiento y, gracias al control diario de los niveles de glucosa, aleja las posibilidades de que derive en complicaciones más graves.

Andalucía es desde el año 2003 un referente internacional en ésta y otras enfermedades hoy incurables, al dotarse entonces de un marco normativo que regula la investigación con células madre embrionarias. Lejano queda ya el intento por parte del Gobierno Aznar de frenar o impedir estas investigaciones, acogiéndose a razones meramente ideológicas o de naturaleza moral. Apenas siete meses después de la victoria socialista en las elecciones generales del 2004, el nuevo Gobierno aprobó un Real Decreto que abría vías a la investigación en este campo con las debidas garantías, y en 2007, mediante la Ley de Investigación Biomédica, se daba cobertura jurídica a los nuevos avances científicos.

En estos últimos años, Andalucía se ha situado a la cabeza en investigación de terapias avanzadas, con una inversión prevista de ciento cincuenta millones de euros hasta 2015 y ciento diez proyectos iniciados, de los cuales treinta se centran en células madre embrionarias. Recientemente, la Comisión Nacional de Seguimiento y Control de la Donación y Utilización de Células y Tejidos Humanos autorizó a nuestra Comunidad el desarrollo de seis nuevos proyectos, siendo el primero de ellos el denominado “Obtención de células productoras de insulina a partir de células pluripotenciales”. El Banco Andaluz de Células Madre, que fue en su momento una estructura pionera en España, ha logrado varios hitos científicos. Andalucía dispone, además, de un Plan Integral de Diabetes, y para el próximo año contará con una Ley de Transparencia en Salud que incluye un nuevo plan estratégico en investigación biomédica. Por cierto, que para este campo la dotación presupuestaria se incrementará un 3,37% con respecto al 2010.

No es posible saber en qué momento todo este gran empeño desembocará definitivamente en el objetivo que persigue, la curación de la diabetes y otras enfermedades crónicas, pero podemos asegurar que hoy estamos más cerca que ayer de conseguirlo y mañana estaremos más cerca que hoy.

Cambio de tendencia

La tasa de paro se ha reducido ligeramente en España en el tercer trimestre por primera vez desde 2007 si bien es cierto que en el mes de octubre se ha registrado un incremento del desempleo a nivel estatal, aunque la subida ha sido menor que la de hace un año.

Según la última Encuesta de Población Activa (EPA), en los dos últimos trimestres la economía española ha generado 155.000 ocupados más. A esto se añade la reducción en 70.000 personas del número de desempleados en el último trimestre del año.

También se ha decrecido el número de hogares con todos sus miembros en paro y ha aumentado el número de hogares con todos sus miembros ocupados. Pese a todo, la tasa de paro sigue siendo elevada en España, en Andalucía y en Almería. Pero también es verdad que tanto la EPA como los datos de INE marcan un leve cambio de tendencia tras dos años muy difíciles.

Las cifras son especialmente alentadoras en nuestra provincia. Almería ha sido la provincia de toda España que más ha reducido la tasa de paro en el mes de octubre, aunque como decía, ni desde el Gobierno de España ni desde el PSOE, nos damos por satisfechos con las cifras actuales de desempleo.

Los socialistas seguimos trabajando, en la medida de nuestras posibilidades, por lograr la recuperación del empleo y de la economía de España. Esta tarea no cuenta con la colaboración de los responsables públicos y orgánicos del Partido Popular porque va en contra de sus intereses electorales.

Es bueno recordar a los lectores y a los señores y señoras del Partido Popular que la mayor tasa de empleo en España y la menor tasa de paro se alcanzaron en 2007 con un Gobierno socialista, el de José Luis Rodríguez Zapatero.

Tampoco se puede pasar por alto en el justo análisis de la situación social y económica de los ciudadanos y ciudadanas en España y en la valoración del trabajo gubernamental que con el PSOE el gasto social ha aumentado en 40 puntos y las personas que cobran pensiones mínimas, donde más se advierte la sensibilidad en política social, han ganado poder adquisitivo en un 27%  mientras que con el Gobierno del PP de Aznar sólo ganaron un 3%.

En cuanto al déficit público actualmente hay un 42% menos que hace un año, o lo que es lo mismo, hay 26.418 millones de euros de déficit menos que hace un año y las medidas de consolidación fiscal han supuesto que haya 4.000 millones más en las arcas públicas.

Así, se están cumpliendo las previsiones del Gobierno y con ellas la seguridad de poder hacer frente al gasto en pensiones y en el resto de prestaciones, frente a los pronósticos del Partido Popular, o quizás sus deseos, de que la Seguridad Social entraría en déficit.

También es digno de ponderar el giro hacia la derecha más reaccionaria que ha ejecutado el PP según se ha podido conocer por las declaraciones de su presidente Mariano Rajoy, afirmando que su plan de ajuste en España sería similar al de David Cameron en Reino Unido. Cameron ha impuesto a los británicos el mayor tijeretazo al Estado del Bienestar en décadas y ha suprimido 500.000 empleo públicos. Ese es el modelo que aplaude el Partido Popular para España.

Privatizar los servicios públicos es la agenda oculta que el PP defiende frente a la crisis, aunque le ha costado y le ha llevado tiempo reconocerlo abiertamente a pesar de que es el modelo que aplica donde gobierna.

El PP propone romper las reglas del Estado del Bienestar y arrebatar a los ciudadanos y ciudadanas los derechos que tanto tiempo les ha costado alcanzar.

Frente a la derecha, el PSOE propone mantener su compromiso progresista y socialista por la igualdad de oportunidades y la justicia para todos y todas.

lunes, 1 de noviembre de 2010

UNA CULTURA DE LA PAZ

En 1978, la Asamblea General de las Naciones Unidas dedicó un período extraordinario de sesiones al desarme, al término del cual se estableció que cada año, y durante una semana, los Estados subrayaran el peligro que supone la llamada carrera armamentística. Esta “Semana del Desarme” se inicia coincidiendo en el aniversario de la fundación de la ONU, el 24 de octubre, y por tanto se celebró la semana pasada, aunque me temo que no fue una noticia particularmente destacada entre tantas otras noticias, y es muy probable que una parte no desdeñable de almerienses, por ejemplo, estén conociendo esto a través, precisamente, de este artículo.

No es una conmemoración, en cualquier caso, que se dirija a los ciudadanos de manera directa, sino a los gobiernos, y en particular a aquellos que han hecho de la venta de armas uno de sus pilares económicos, países ricos o en vías de serlo, como Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Rusia o China, los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU, responsables nada menos que del ochenta y ocho por ciento de las exportaciones de armas convencionales.

La venta de armas, legal o clandestinamente, es, no descubro nada, un gran negocio, un negocio macabro y proclive a generar zonas oscuras de intermediación y soborno, pero negocio al fin. Las cifras que se refieren no ya a los grandes artefactos bélicos, sino a las llamadas armas ligeras, son estremecedoras: cada año se fabrican dos balas y media por cada uno de los seis mil cuatrocientos millones de personas que habitamos el planeta, y un arma por cada diez. Casi la mitad de las muertes violentas que estas armas y sus municiones provocan en el mundo ocurren en lugares donde no hay guerra, y, en líneas generales, los países más gravemente afectados por ese clima de miedo (africanos, asiáticos y latinoamericanos, fundamentalmente) ven cómo la sensación de inseguridad hace que la demanda de armas sea mayor, que el dinero que podría usarse en educación o sanidad se destine al comercio de ellas y que el turismo desaparezca.

El viernes pasado tuve la ocasión de asistir en Lanzarote a la celebración social de la que ya era una excelente iniciativa política, y que consiste, básicamente, en apostar por la paz como vehículo de desarrollo económico. El origen de esta Jornada, en la que también estuvieron personalidades como el presidente del Senado, Javier Rojo, y el ex-director general de la UNESCO, Federico Mayor Zaragoza, es una moción presentada por el senador socialista Marcos Hernández en la que se pide al Gobierno la creación en Canarias de una primera Zona Internacional para la Cultura de Paz y Derechos Humanos, y que se introduzca esta figura novedosa en el ámbito de las Naciones Unidas y en el Consejo de Europa. En definitiva, la cultura de la paz como valor añadido a una oferta turística. Es, a mi juicio, una gran idea.

Dijo Erasmo de Rótterdam que “la paz consiste, en gran parte, en el hecho de desearla con toda el alma”. No hay mayor aspiración del ser humano.

Servicio público, sostenibilidad y recuperación económica

Cumplir con las exigencias europeas de reducción de la deuda pública ha llevado a la inmensa mayoría de las administraciones en España a plantear unos presupuestos para 2011 con una inversión más reducida.

 La Junta de Andalucía también se ha sumado a esta apuesta por la austeridad priorizando en sus presupuestos unas materias frente a otras. Así, en el borrador de Presupuestos de la Comunidad el Gobierno andaluz ha planteado unas cuentas con la misma columna vertebral que el Gobierno central, centrando el esfuerzo inversor en áreas que ayudan en la salida de la crisis y en el mantenimiento de las prestaciones sociales.

Las características de la economía andaluza y de nuestro tejido laboral y social han determinado también el destino de las inversiones del Gobierno de Pepe Griñán. Los Presupuestos para 2011 que ha planteado la Junta, cuya inversión global asciende más 31.682 millones, dedican más de tres de cada cuatro euros a mantener las políticas sociales. En concreto a la  educación se destinan 7.485 millones de euros, un 1,3% más que en 2010. En esta línea también destaca la partida dedicada a sanidad, de 9.390 millones de euros que suponen uno de cada tres euros de inversión.

Otro asunto que el Gobierno andaluz ha querido reforzar en a inversión son las pensiones no contributivas, que se complementará con una aportación de la Junta del 2%. Andalucía tiene un elevado número de personas que cobran este tipo de pensión por no haber estado dadas de alta y cotizando a la Seguridad Social. El Gobierno andaluz, consciente de ello, y de que este tipo de pensiones son de las más bajas, ha querido seguir incrementando las rentas de estos pensionistas a los que el Gobierno central también seguirá incrementando sus retribuciones al igual que a los beneficiarios de pensiones mínimas.

En los presupuestos de la Junta de 2011 sea puesta asimismo por el modelo de la Andalucía Sostenible, para remontar las dificultades económicas y salir reforzados de estas. Contempla, entre otros, una inversión de 46,6 millones de euros para el programa de internacionalización del tejido productivo y empresarial andaluz, lo que supone un incremento de la inversión de 16,5 millones con respecto a 2010. El desarrollo de las empresas andaluzas lleva aparejado el crecimiento de la oferta y del tejido laboral de Andalucía. En los planes presupuestarios de la Junta de 2011 se prevé la creación de 24.000 empleos.

En la apuesta por la Andalucía Sostenible se aumenta en 35 millones los fondos del Programa de Desarrollo Rural de Andalucía de 2011, y se propone una inversión de 116,8 millones de euros. Y 30,1 millones serán para el fondo de apoyo a las pymes agroalimentarias, de especial relevancia en Almería.

Y como ha venido siendo habitual en la agenda política de Pepe Griñán las corporaciones locales son protagonistas también de los presupuestos de la Junta de 2011, con una inversión para la financiación incondicionada de los ayuntamientos que se duplica y alcanza 420 millones de euros y el Plan de Cooperación Municipal asciende a los 1.362 millones, un 11,5% más. Ante el anuncio de este incremento de inversión municipalista los responsables del PP se mostraron incrédulos, es lógico, ellos jamás habrían sido capaces de hacer esta apuesta por los Ayuntamientos. Lo importante es que todos ellos, gobierne quien gobierne, van a percibir más inversión que nunca de la Junta para desarrollar sus proyectos.

Los andaluces dispondremos de mejores servicios públicos de competencia regional y municipal gracias a los presupuestos de la Junta de 2011.

lunes, 25 de octubre de 2010

Crisis para salir de la crisis

Hace unas semanas la actualidad política en España estaba centrada en las reformas que el Gobierno central había propuesto para encarar la fase actual de la crisis económica global que atravesamos. Y esta semana es una nueva reforma la que copa la atención política del país, en este caso, la del organigrama del propio Gobierno y sus responsables.

En la línea de la austeridad y el ahorro el Presidente del Gobierno ha decidido reducir el número de sus ministerios, sin restar importancia e interés por los asuntos que abordaban el Ministerio de Vivienda y el Ministerio de Igualdad, por lo que ha creado dos nuevas Secretarías de Estado.

Otro de los objetivos claros de la última remodelación del Gobierno de España llevada a cabo por José Luis Rodríguez Zapatero es crear un Gobierno con un perfil más político y menos técnico, ahora que se hace fundamental recuperar la confianza de la ciudadanía en el futuro de nuestro país para que los cambios que se han iniciado den cuanto antes sus frutos.

Las decisiones difíciles ya están tomadas y los últimos Presupuestos Generales de la legislatura que no estarán determinados por las elecciones generales ya están en vías de aprobarse, por tanto, el núcleo de la gestión de esta crisis ya está resuelto.

Es evidente que desempeñar las tareas de Gobierno desgasta y cuando se tiene además la responsabilidad de llevar a cabo cambios difíciles, que no todos los ciudadanos entienden, es aún más complicado seguir indemne ante la opinión pública al frente de un Ministerio. Si analizamos los cambios que ha decidido realizar en su Gobierno el vemos que no ha actuado únicamente movido por esto. Tenemos casos como el de la ex vicepresidente primera del Gobierno de España, María Teresa Fernández de la Vega, que según vienen reflejando todas las encuestas es de los ministros y ministras mejor valorados del Gobierno de Zapatero.

Si tenemos en cuenta el interés de Andalucía y en especial de nuestra provincia, la más importante modificación del Gobierno de España es la que afecta al Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino. Este Ministerio es el que gestiona el principal pilar económico de la provincia de Almería, la agricultura, de ahí el interés que ha despertado el relevo al frente del mismo de Elena Espinosa por Rosa Aguilar. Pero es que además que la ministra sea andaluza es una ventaja más para nuestros intereses.

En Andalucía las organizaciones agrarias, pesqueras y ecologistas han valorado de forma muy positiva el nuevo nombramiento de Rosa Aguilar como ministra. Y aunque no lo reconozcan públicamente estoy seguro de que también el Partido Popular e Izquierda Unida saben que para los intereses de Andalucía y de Almería viene muy bien este cambio al frente del Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino.

Pero además también es importante para nuestra Comunidad las nuevas responsabilidades públicas de Alfredo Pérez Rubalcaba, cuya vinculación a Andalucía le ha llevado a ser diputado en el Congreso por Cádiz. Además se ha mantenido también como ministro a Manuel Chaves, al frente de un Ministerio que amplía sus competencias e incorpora la función pública.

En definitiva, de la crisis de gobierno de Rodríguez Zapatero han salido reforzadas Andalucía y Almería. Se abre una nueva etapa para acelerar la recuperación frente a la crisis y se inicia un proceso de acercamiento a la gente del discurso político que será, indudablemente, bien recibido por todos los ciudadanos y ciudadanas.

Y quienes se han aprovechado del sufrimiento de la gente por la crisis para tratar de ganarse a los ciudadanos empiezan a dudar de sus posibilidades frente al nuevo Gobierno de España.

UNA INTENSA SEMANA


No cabe duda de que la semana pasada tuvo un extraordinario calado político. Frente a quienes pregonaban la idea de un Gobierno débil, vacilante, que no podría agotar la legislatura, el Ejecutivo presidido por Rodríguez Zapatero lograba despejar la incertidumbre presupuestaria, garantizaba la estabilidad política mediante acuerdos con otros partidos y procedía a una remodelación ministerial encaminada a consolidar las reformas económicas y sociales puestas en marcha.

Todo ello es, objetivamente, bueno para los intereses de España y pésimo para los que tienen depositadas sus expectativas electorales en el mero desgaste del Gobierno, no en su propia capacidad de despertar ilusión o esperanza en los ciudadanos. Rechazadas en el Congreso todas las enmiendas a la totalidad de los Presupuestos Generales –es el turno ahora de la tramitación de las enmiendas parciales-, nuestro país encara un futuro inmediato sin sobresaltos. Se olvidan los que esperaban lo contrario que la imposibilidad de aprobar unos Presupuestos no habría sido negativo solamente para el Gobierno, sino que sobre todo habría resultado nefasto para nuestra economía: habría provocado la desconfianza hacia nuestro país, habría frenado la recuperación económica y habría dejado en el aire las necesarias reformas de nuestro modelo productivo que ya están siendo acometidas.

Que el líder de la oposición y empecinado aspirante a La Moncloa –en España nunca una misma persona había estado en disposición de ser derrotada tres veces en unas elecciones generales- criticase tan agriamente los acuerdos alcanzados para asegurar la aprobación de los Presupuestos, demuestra cuál es la principal preocupación del PP: no el hecho de que el país pueda disponer de unas cuentas para el 2011 que legítimamente no le gustan, sino que con ellas el actual Gobierno afianza una segunda legislatura completa. Evidencia, además, tener una flaca memoria, pues los nacionalistas a los que ahora vilipendia por llegar a acuerdos con el Gobierno socialista son los mismos que afirmaron haber obtenido de Aznar  cesiones extraordinarias a cambio de su investidura.

Despejadas las incertidumbres presupuestarias y políticas, el presidente Zapatero procedió de inmediato a realizar una profunda remodelación de su Gobierno con el fin de afrontar el tramo final de la legislatura desde la fortaleza y la austeridad. Será el equipo que complete las reformas, acelere la recuperación de la economía y el empleo y siga salvaguardando nuestro Estado del Bienestar. Se trata, además, de un Gobierno en el que Andalucía contará con tres piezas fundamentales: Manuel Chaves amplía las competencias de su Ministerio, que ahora se ocupará también de la Función Pública. Alberto Pérez Rubalcaba, diputado por Cádiz, adquiere un enorme peso político al ocupar la Vicepresidencia Primera conservando sus responsabilidades como ministro del Interior. Finalmente, la cordobesa Rosa Aguilar, que ha realizado una excelente labor en el Gobierno andaluz como consejera de Obras Públicas, se hace cargo de la cartera de Medio Ambiente, y Medio Rural y Marino, un Ministerio vital para la economía y el futuro de nuestra Comunidad Autónoma, pues Andalucía ocupa el primer puesto en superficie agraria y en producción.

Queda año y medio para las próximas elecciones generales, un tiempo demasiado valioso como para que el señor Rajoy lo ocupe únicamente pensando en las urnas. Nunca es tarde para que  el PP se dé cuenta de que puede y debe jugar un papel importante en el objetivo de recuperar el crecimiento económico y crear empleo: bastaría con que empezara a hacer una oposición constructiva.